1. Los tiempos ondean y atacan. Y los hermanos se alistan para la lucha sangrienta, uno contra otro.
2. La virgen se ha vuelto infiel en su corazón; ella no quiere amar, sólo ganar para luego despreciar todos los corazones en el pecho masculino que se ha vuelto femenino y por tanto fácil de vencer.
3. Y si ella, entre los muchos cisnes masculinos, se tropieza con un corazón masculino verdadero, uno que no permite ser engañado como una caña ante las miradas engañosas de la serpiente que mora en el corazón infiel de la virgen;
4. Entonces ella llora lágrimas amargas, no de arrepentimiento, sino sólo por no haber obtenido la victoria, porque su poder malvado no ha logrado extenderse por sobre todos los corazones masculinos.
5. ¡Oh tiempos, oh hombres y costumbres! La mujer sólo quiere jugar con los corazones masculinos.
6. El hombre sólo quiere divertirse sensualmente con la mujer; tan sólo quiere amarse a sí mismo en el corazón de la mujer, y revolcarse en su carne suave y curvilínea como los cerdos.
7. El gobernante ya no es más un hermano luminoso a los hermanos, ni ofrece una orientación y guía a los pueblos; tan sólo es un señor ante todos los hermanos, uno que quiere ser el único que tiene la razón.
8. Un señor orgulloso y poderoso con la espada que está sobre todos los bienes y toda vida y muerte de sus hermanos que languidecen.
9. El estafador adinerado, autorizado por la ley para engañar a muchos hermanos, goza de prestigio, elogio y honra, y además es llevado sobre los hombros de muchos pobres que reciben un salario ínfimo;
10. El pobre, al contrario, es siempre mirado con desprecio y burla por todos los ricos, y es expulsado por la puerta como si fuera un pordiosero parásito. Oh Padre santo en el Cielo, ¿cuánto tiempo más durará esta situación?
11. ¿Cuándo las montañas serán iguales a los valles? ¿Cuándo se besarán Caín y Abel?
12. ¿Cuándo será el día en que la virgen, en su atuendo femenino, retorne a la dignidad sencilla y santa de los ángeles, para dar alegría al corazón masculino que está lamentándose ya hace mucho tiempo?
13. ¿Y cuándo, pues, finalizarán las ansias, adictas a la fama, de los gobernantes; la férrea opresión sobre sus hermanos, las cadenas de los esclavos y toda las otras innumerables tormentas?
14. ¿Cuándo aquel que está sentado en el trono se convertirá en un hermano al hermano? ¿Cuándo empezará a enseñarles y guiarles y orientarles como un arcángel portador de leyes sabias y conducirles como hermanos hacia Ti, oh Padre santo de todos los hombres de la Tierra?
15. ¿Y cuándo, oh Padre en el Cielo, el sacerdote abandonará la máscara vergonzosa llena de apariencia adicta a la honra y llena de engaño, y anuncie a sus hermanos la Palabra pura y viva de Tu Espíritu santo?
16. (Dice el Señor:) "¡Escucha tú, espíritu, que estás vivo y tienes aun un corazón latiente! Yo quiero ahora anunciarte con Mi Boca completamente divina la respuesta que te dará Alegría, Consuelo y Verdad y Amor y que proviene de todos los Cielos.
17. ¡Oh, dime a Mí que soy el Padre de los ángeles en el Cielo y de los hombres en la Tierra! ¿Cuándo terminarán de pelear y reñir los hijitos, que aún no tienen edad y educación, en la casa de sus padres?
18. Tú dices: esto sucederá cuando ellos se vuelvan cada vez más maduros y educados y sabios y puros en el pensar en la acción y en la voluntad y en el amor en el corazón del alma.
19. Dice el Señor: Esto es completamente correcto y sabio; pero entonces, si la Tierra no es otra cosa que la habitación espaciosa de los hijos, y esto en un sentido muy serio, ¿cómo, pues, puedes preguntar, cuándo cambiarán las cosas sobre la Tierra?
20. ¡Tan sólo dejad que los niños maduren y ganen años en la habitación siempre tambaleante qué sirve para los embriones de los ángeles; y entonces verás, bajo una luz intensa, la respuesta clara a tu pregunta melancólica! Pues los niñitos en la cuna gritan más fuerte que los que están sobre el jardín de la vida y que ya están más despabilados". —
21. Oh Padre santo y lleno de Amor, ahora lo veo todo mucho más claro; sólo con tales ojos se puede observar de la forma más comprensible toda esas acciones coloridas y desordenadas de los hombres sobre la tierra. ¡Por eso que toda Honra y todo Amor y agradecimiento sean para Ti, oh Padre! Amén.
Fuente: Salmos y Poemas recibido por Jakob Lorber